La lluvia en Yucatán llega como un suspiro fresco sobre la tierra sedienta. Con cada gota, los caminos de piedra se oscurecen y el monte cobra vida. Las hojas, antes polvorientas, brillan intensamente, verdes y vibrantes, mientras las flores silvestres despiertan en estallidos de color entre los arbustos. El canto de las aves se mezcla con el aroma húmedo de la tierra, y todo parece renovarse. En estos días, la naturaleza yucateca se pinta con los tonos más intensos de la vida, como si la lluvia trajera consigo una nueva paleta para el paisaje.
BIOPARQUE PAKAL KAAX 🌳 ✅️
#bioparquepakalkaax